miércoles, 24 de febrero de 2010

Quizás...


Para que sufrir me dije, para que lamentarse... Nada es para siempre escuché una vez, pero tal vez más allá de esas palabras algo de razón envuelve de una manera indomable mis pensamientos y me vibra la idea de sentir que la vida es un regalo, de no saber cuando ni como termine mi historia en este mundo.

Quizás, la experiencia me ha enseñado hoy a tener otra visión sobre tantas preguntas que nadie pudo responderme...quizás sea este momento presente en el que hoy dedico instantes de felicidad a lo mas intimo de mi ser y me reflejo en todo lo que mis ojos ven, quizás sea la luz de la luna, o el cielo estrellado, quizás sea la canción que habla de mi vida a un ritmo cardiaco...

Quizás sea cierto que nada es para siempre, o no...puede ser que todo sea mucho mas simple de lo que uno cree, o el camino sea interminable aunque se cierre el telón...

sábado, 20 de febrero de 2010

Háblame...


Háblame, le dije, y su voz que añoraba escuchar después de tanto tiempo, despertó por fin de su garganta, proyectando un sol imaginario en mi cabeza, sintiendo sus cálidas manos en mi pecho y escuchando mis latidos se quedó dormida una vez más.

Fue al amanecer cuando los rayos del sol se filtraron apagando mis sueños, encendiendo mi mente, tras los finos párpados que cerrados protegían mi retina de este acorazado mundo en el que despertar es un milagro de dios!

Y decidí seguir inmóvil, observando su belleza en la quietud, dibujando en el aire trazos de alegría que inspiraba en mi interior esta extraña y placentera sensación...

Se movió, abrió sus ojos, me miró y en ese instante bautizó con su mirada el día, y después me dijo, quiero que se pare el tiempo...


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Después, dejé de imaginar...me levanté dejando a un lado mi libreta, dando por cerrado este relato, pensando en lo fácil que me resulta expresar aquello que tanto conoce mi alma y salí a la calle, estudiando los cuerpos de la gente, el ir de aquí a allí, hablando de aquello y de lo otro, y al llegar a mi destino, me dispuse a entrar, dejar mis cosas, y prendí la luz de la sala...


Las luces esta vez enfocaban otras vidas a las que un guión debía penetrar más allá de sus retinas...

domingo, 14 de febrero de 2010

Su querer...


Y suspirar de amor alimentando los segundos esperando a que vuelva, a rozar sus labios y estremecerme a su lado...

Imaginarme la vida eternamente a su lado, escribiéndole poemas de amor y recitarlos en el susurro de erizar su piel, cavalgando sobre mi corazón en cien mil latidos para llenar de sangre y pasión esta vida.

Amanecer pegados, saciándonos en el calor de esos cuerpos desnudos, deslizándose bajo esos dedos que desafían el placer de sentirme vivo.


...Y bajo las sábanas hoy ausente se encuentra su cuerpo, aunque no su alma, no su amor, aquel que conquisté sin más querer que su querer...

miércoles, 10 de febrero de 2010

Vacuidad


Sería ayer, esa cortés y melódica lluvia, entre el caminar de esas calles mojadas, la ausente compañera a mi absorto e ingrávido paso a sostener bajo mis pies el universo.


El frío ha trocado el mundo al despertarse acá junto a mi piel, colándose a ras de mi cuerpo-mente, osado a contemplar si puedo o quiero, si vengo o voy, si pienso y luego existo...


Arropado en lo intrínseco de las cosas me detengo, percibo la calma que paciente espera a mañana y en la arriesgada lucha interna de mi ser vacío lo que está de más...


Despertar de mi alma perpetua resuena sin más en lo profundo de este corazón.

sábado, 6 de febrero de 2010

renaciendo...


No encontré sentir aquel que amanece y se funde como abrazo efímero a mis deseos, no alcancé la expresión de mi cuerpo en el placer absoluto de vaciar mi alma en tu mirada, pero nadie me advirtió que las caricias de tu piel fueran tan profundas y arrancasen de un suspiro mis latidos...

Asfixié mi llanto en la melancólica noche que abrigaba cautelosa mi condena a perderte, suplicándole a la luna tu calor.

Y en la sigilosa bruma de tu sonrisa tracé mi corazón...

En la insípida visión de tu recuerdo, se estremece mi ser, lánguido y confuso, vivo y muerto, renaciendo...