viernes, 4 de febrero de 2011

El último tren

Un café nos esperaba siempre entre valientes palabras que juraban engañarnos, y prometido el destino se encargó de encontrarnos.

Despistado en el umbral de los sueños, traspasé la realidad de un submundo imaginario, y allí sentada estabas tú, desvistiendo mi alma con tu mirada..., en ella me enganché y se detuvo el tiempo.

Me abracé a la dulce voz que susurraba en busca de ser escuchada, y tus ojos me guiaron en la tímida frontera de los sentimientos, descafeinado sabor del tiempo, me bebí todos tus sueños.

Y con un adiós nos separamos, se cerraron las puertas del último tren, y tus manos se alejaron con nostalgia de las mías, y en la mágica ilusión del presenté viajé de nuevo a mi mundo.

4 comentarios:

Laura Mequinenza dijo...

Te veo muy inspirado :) Me alegro corazón ^^

Giovanni dijo...

si, son fases, y ahora me acompaña! Un abrazo! Artista ;)

A.C. dijo...

Qué sensación linda me generó leerte, si bien tus palabras me hacen pensar en una despedida, me hicieron pensar en el amor, más bien en cómo abrazar al amor.
En fin, hace un rato que no estamos en contacto, siempre es bueno volver por aquí. Saludos

Giovanni dijo...

Gracias A.C.
Un abrazo!