
No digas nada...mirame. Deja que tu ojos me abracen, que se fundan nuestras almas entre la espesa niebla que atraviesa lo invisible, y justo ahí, dejate arropar en el superfluo murmullo agitado que manifiesta tu ser.
Y después... el silencio será nuestro aliado.
Ya no quedarán palabras que decoren nuestras vidas para entendernos mejor.
Deja que te embriague este momento.
Abre los ojos.
Mirame.
3 comentarios:
mmmmmm...ver con los ojos de tu ser....precioso..
gracias :)
:) Mirame...
Me encanta, es muy intenso ^^
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