jueves, 29 de mayo de 2008

Escuchame!


Nos pasamos el día escuchando, escuchando ruido, escuchando música, escuchando palabras, palabras que se funden, palabras que nos hacen sentir, algunas son bellas, otras no tanto pero sin nuestro gran sentido del oído jamás sabríamos que se siente al escucharlo.
Esta tarde he disfrutado con una amiga de poder escuchar y también que me escucharan. La comunicación fluye cuando la persona que te escucha refleja su atención atenta a tus palabras, observando y siendo observado. Miradas que atraviesan el alma para entrar en tu mundo, en ese encuentro donde sólo existes tú, el emisor y el receptor. Un poder que ejerce en tu cabeza y termina expulsado a través de tu voz, una voz en forma de susurro, una voz grave, dulce, tímida, no importa como sea, todas son capaces de transmitir lo que sientes.
Es increíble lo fácil que es darse cuenta cuando notas que tu colega el receptor te escucha, como si el discurso que le esta llegando fuera lo más aburrido del mundo pero con una tierna aceptación en su mirada sigue tus pasos a la vez que esta pensando cuando acabarás de hablar y dejarás que sea el quien te diga lo que tienes que escuchar!
He llegado a la conclusión de que no escucha más aquel que calla e intenta seguir tus palabras, sólo te escucha en realidad aquel que te responde con la conexión de la mirada, una mirada es transparente, tiene más fuerza que una voz llena de celos, donde disfraza la mentira para no mostrar la parte más sucia que se esconde en tu consciencia.
Sólo puedo decir que pocas son las personas que escuchan de verdad y muchas a las que hay que escuchar, de ello se aprende en la vida, el silencio es la respuesta a tus preguntas... y tu que haces, ¿escuchas? o ¿te escuchan?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Soy la amiga de esa tarde... Aprende de esas palabras que plasmas en 'Escuchame', a veces el silencio merece más la pena que una contestación inutil a una pregunta estupida o un comentario peor, por ello creo que tienes que aprender de esas palabras y no encenderte en esas ocasiones si no ignorar toda la basura o palabras sin sentido, que a veces se pueden llegar a decir. Con tu silencio e indiferencia mostraras que no te vale la pena lo absurdo y puede que asi la gente empice a escuchar y no seguir escuchandose a si mismos. Besukis