
Dibujé su sonrisa en un papel, pero el tiempo la borró y la guardé en mi corazón...
Busqué palabras de amor entre la gente y alguien me vendió su alma, solitaria y llena de pena. Le cambié la verdad a la mentira y la convertí en fantasía, me perdí por el camino por que andaba muy deprisa y cuando llegué recién terminó...
Despedí la noche sin rezar, nadie me enseñó a creer, sólo vi pasar el viento lleno de vida...
Recogí mis sueños y juntos nos fuimos, caminando sin prisa sintiendo la brisa...
5 comentarios:
Nadie va a “enseñarte a creer”…solo tienes que abrir tus ojos.. y no pedir nada a cambio.
Astrid, tienes toda la razón, sólo la vida y el camino que sigues por ella te enseña!
No tengo toda la razon,hay mucho gente que te puede enseña el camino a "creer"..pero solo tu decides si quieres caminar o quedar en "casa"
Yo seguiré mi camino, el mismo en el que aprendí un día a caminar por el...y por el seguirán mis pies paso a paso!
Nunca puedes seguir el camino solo,porque siempre encontras alguien quien te aconse o te guie por donde puedes ir.Los sueños solo los puedes proyectar a base de tu ilusion, y para fortalecer lo proyectado solo tienes que saber escuchar para saber las opiniones y luego escoger el camino adecuado.Porque los caminos pueden ser cortos o largos. Son como metas. Pero sigue asi y aprenderas
Publicar un comentario