La repercusión económica y la pobreza ha visto obligados a tantos inmigrantes a salir de sus países a otros lugares con opción a salvar sus vidas, ayer, hoy y cada vez serán más los que lleguen para llenar el corazon de esperanza, otros simplemente encuentran unos intereses que en su país no alcanzarían, al fin y al cabo lo que nos une es lo mismo, las ganas de vivir. Unos tienen mas, otros menos, pero lo mas difícil de subsanar en sus rostros es la ofensa que sienten por ser de otro lugar. Esta claro que el racismo seguirá latiendo en los corazones de aquellos que han sido educados ignorando un mundo bello, donde todos somos personas, blancos, negros, amarillos. Aprendamos de las culturas que tanto nos enseñan que el interior es más rico cuando el color lo llevas en el corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario