miércoles, 7 de enero de 2009

Otelo


Llevo unos dos meses preparando una escena del gran Shakespeare, Otelo. Junto con mi compañero de Teatro, el hace del malvado Yago y yo del moro de Venecia.
Nunca pensé que sería tan difícil...De unos textos que en verso se transforman en una muestra contemporánea que extrae lo más esencial de la obra, la ira, los celos, el engaño, la maldad, el amor...
Está sacando de mí algo que jamás viví, desconocer ese sentimiento tan tormentoso del veneno que trae el amor en ocasiones que son los celos.
Conocer esa emoción ha volcado en mi nuevas sensaciones que me aportan una visión interna del amor que dentro de mi ser supera la ficción e incluso puedo llegar a creermelo...
No sé como saldrá, pero la experiencia está valiendo la pena.

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